- 1. Un aliado contra la grasa: Consumir vino tinto
activa la función de un gen que impide la formación de nuevas células de
grasa y ayuda a movilizar las existentes, según un estudio realizado
por el Instituto Tecnológico de Massachusetts.
A pesar de que el vino contiene aproximadamente 165 calorías por copa (unos 177 mililitros), contribuye a reducir la obesidad y el sobrepeso si es consumido con moderación. - 2. Combate las bacterias bucales:
Investigadores italianos han demostrado que la antigua costumbre de
tratar las infecciones de las encías con vino tiene un fundamento
científico.
Algunos compuestos presentes en esta bebida frenan la proliferación de estreptococos y otras bacteria vinculadas a las caries, además de otros gérmenes asociados con la gingivitis y los dolores de garganta. - 3. Mejora la función cognitiva: Nada menos que
unos 70 estudios científicos han demostrado que el consumo moderado de
vino mejora el funcionamiento de nuestro cerebro y, en pequeñas
cantidades, previene la demencia.
Los científicos creen que ésto es debido a la elevada cantidad de antioxidantes en la composición del vino, de notables efectos beneficiosos para el organismo humano. - 4. Un complemento placentero: Al degustar vino
tinto con moderación se liberan endorfinas en nuestro cerebro
provocando una sensación de placer, según un estudio realizado por la Universidad de California.
Como dato curioso, este estudio también ha demostrado que si la luz ambiental es roja o azul, el sabor del vino es mucho más intenso que cuando ésta posee tonalidades verdes o blancas. - 5. Combate el sedentarismo: Una investigación publicada en The FASEB Journal
sugiere que el resveratrol (la molécula de la eterna juventud) presente
en el vino tinto ayuda a combatir las consecuencias negativas de una
vida sedentaria.
- 6. Limpia el paladar: Consumido durante la
comida, el vino tinto nos ayuda a percibir mejor los sabores que cuando
bebemos únicamente agua. Ello se debe a que el vino posee propiedades
astringentes, que evitan la excesiva sensación grasienta causada por
alimentos como la carne roja, y además nos permiten degustar mejor la
comida.
- 7. Reduce el riesgo de cáncer: Según diversos
estudios, el vino tinto ayuda a reducir el riesgo de contraer cáncer de
pulmón en el caso de los hombres, mientras que en las mujeres bloquea el
crecimiento de las células responsables del cáncer de mama.
Se cree que estas fantásticas propiedades pueden ser debidas al resveratrol presente en las uvas, también bautizada como la molécula de la eterna juventud. - 8. Cuida la próstata: Numerosos estudios
científicos han concluido que el consumo de 7 vasos de vino tinto a la
semana (uno al día) después de cumplir los 40 años de edad, puede
reducir en más de la mitad los diagnósticos de cáncer de próstata.
- 9. Aliado del corazón: Al igual que ocurre con
otros supuestos beneficios, numerosos estudios han demostrado que una
copa de vino tinto al día en el caso de las mujeres y dos en el caso de
los hombres, contribuyen a aumentar los niveles de colesterol bueno en
la sangre y a prevenir las complicaciones cardiovasculares derivadas.
- 10. Hábitos saludables: Un estudio publicado en el British Medical Journal
ha revelado que las personas aficionadas a la degustación del vino
suelen comprar alimentos más saludables y tener una alimentación más
equilibrada que las personas más amantes de la cerveza.
Según este informe, los enófilos consumen más aceitunas, frutas, verduras, quesos bajos en grasa.
Fuentes; Viralika / British Medical Journal / The FASEB Journal / Universidad de California / Tecnológico de Massachusetts.
MAS INFO: http://buenasiembra.com.ar/salud/terapias-alternativas/vinoterapia-274.html
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