La presidenta Cristina Fernández de Kirchner firmó hoy el decreto que declara al vino "bebida nacional", durante un acto celebrado esta noche en el Centro Cultural del Bicentenario, que funciona en la sede del ex Correo Central.
Además, la Presidenta se pronunció a favor de declarar al mate como "una infusión nacional", y dio instrucciones al ministro de Agricultura, Julián Domínguez, para que comience a trabajar en el tema.
Del acto participaron Domínguez y los gobernadores de Mendoza, Celso Jaque; de San Juan, José Luis Gioja; de La Rioja, Beder Herrera; de Salta, Juan Manuel Urtubey; y de Neuquén, Jorge Sapag.
También estuvieron presentes el titular del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Guillermo García; y el presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), José Molina.
Cristina sostuvo que la declaración del vino como bebida nacional no responde sólo a cuestiones económica, sino que hace a la "identidad" y a la "cultura nacional" de los argentinos.
La Presidenta resaltó que en el sector vitivinícola "hemos logrado una cosa muy importante: articular todo el esfuerzo y la inversion privada con políticas muy fuertes de parte del Estado".
"Hemos hecho una muy buena articulación entre el Gobierno nacional, las provincias, las bodegas y los productores", repitió la jefa del Estado.
"El vino Argentino es un honorable embajador en el mundo y enorgullece a los argentinos que beben en el mercado doméstico los mismos vinos que exportan y que prestigian al país en todos los continentes", señala el decreto presidencial que declara al vino bebida nacional.
Recuerda que la vitivinicultura tiene "más de cinco siglos de historia", y que "favorecida por óptimas condiciones climáticas y de suelo" da lugar "a una actividad económica creciente sustentable, respetuosa del medio ambiente y de gran importancia social y económica para todas las provincias productoras".
En otro tramo de su discurso, la Presidenta dio "instrucciones" al ministro de Agricultura "para que comience a trabajar en la declaración de "infusión nacional" al mate.
"Si los ingleses tiene el `té party´, por qué nosotros no tenemos algo similar con el mate", dijo Cristina.
En base a los números informados por el sector vitivinícola, el año pasado las ventas totales de vinos argentinos alcanzaron los 10.500 millones de pesos.
De ese total, el 77 por ciento de la facturación correspondió a ventas en el mercado doméstico y el restante 23 por ciento a colocaciones en mercados externos.
El volumen total comercializado ascendió a 1.310 millones de litros, de los cuales el 79 por ciento correspondió al mercado interno y el 21 por ciento a exportaciones.
La mano de obra directa e indirecta que genera la vitivinicultura ocupa a unas 400.000 personas y sus familias, con gran relevancia para las economías regionales de toda la zona oeste del país.
Del acto participaron Domínguez y los gobernadores de Mendoza, Celso Jaque; de San Juan, José Luis Gioja; de La Rioja, Beder Herrera; de Salta, Juan Manuel Urtubey; y de Neuquén, Jorge Sapag.
También estuvieron presentes el titular del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Guillermo García; y el presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), José Molina.
Cristina sostuvo que la declaración del vino como bebida nacional no responde sólo a cuestiones económica, sino que hace a la "identidad" y a la "cultura nacional" de los argentinos.
La Presidenta resaltó que en el sector vitivinícola "hemos logrado una cosa muy importante: articular todo el esfuerzo y la inversion privada con políticas muy fuertes de parte del Estado".
"Hemos hecho una muy buena articulación entre el Gobierno nacional, las provincias, las bodegas y los productores", repitió la jefa del Estado.
"El vino Argentino es un honorable embajador en el mundo y enorgullece a los argentinos que beben en el mercado doméstico los mismos vinos que exportan y que prestigian al país en todos los continentes", señala el decreto presidencial que declara al vino bebida nacional.
Recuerda que la vitivinicultura tiene "más de cinco siglos de historia", y que "favorecida por óptimas condiciones climáticas y de suelo" da lugar "a una actividad económica creciente sustentable, respetuosa del medio ambiente y de gran importancia social y económica para todas las provincias productoras".
En otro tramo de su discurso, la Presidenta dio "instrucciones" al ministro de Agricultura "para que comience a trabajar en la declaración de "infusión nacional" al mate.
"Si los ingleses tiene el `té party´, por qué nosotros no tenemos algo similar con el mate", dijo Cristina.
En base a los números informados por el sector vitivinícola, el año pasado las ventas totales de vinos argentinos alcanzaron los 10.500 millones de pesos.
De ese total, el 77 por ciento de la facturación correspondió a ventas en el mercado doméstico y el restante 23 por ciento a colocaciones en mercados externos.
El volumen total comercializado ascendió a 1.310 millones de litros, de los cuales el 79 por ciento correspondió al mercado interno y el 21 por ciento a exportaciones.
La mano de obra directa e indirecta que genera la vitivinicultura ocupa a unas 400.000 personas y sus familias, con gran relevancia para las economías regionales de toda la zona oeste del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario