domingo, 18 de julio de 2010

Arianna Huffington, la bloguera que desafía a los medios...

La bloguera que desafía a los medios estadounidenses
Foto: Gentileza @ariannahuff
Arianna Huffington, directoa del blog que lleva su apellido, cree que los periódicos se deberán adaptar a los nuevos cambios, pero sostiene que mantendrán su vigencia
Cómo fueron los inicios de Ariana Huffington
,
la joven griega que se casó con un magnate petrolero y que llegó a competir con Arnold Schwarzenegger por el estado de California



Qué piensa la bloguera que desafía a los medios estadounidenses

Entrevista a Arianna Huffington, fundadora del The Huffington Post , el sitio de noticias que rivaliza con The New York Times y The Wall Street Journal con su combinación de actualidad política, columnas de opinión y comentarios regulados


Joseba Elola
Diario El País

The Huffington Post
, una espiral que no deja de incorporar visitantes, es el gran fenómeno, como sitio de noticias de nuevo cuño, de la era digital. Los expertos calculan que para finales de año ya habrá sobrepasado en función de tráfico al sanctasanctórum, The New York Times : la llamada Dama gris del quiosco norteamericano, amenazada por la gran dama de la blogósfera.

La información política ocupa en torno a un 25 por ciento del sitio web. Abre siempre con un gran tema sustentado en una gran imagen. Incorpora 22 secciones: desde política hasta comedia, pasando por tecnología y estilo. Está abriendo nuevas secciones locales: ya está presente en Chicago, Denver, Los Ángeles y Nueva York.

Sin ir más lejos, en la cobertura del vertido de crudo en el golfo de México, The Huffington Post publicó diversos vídeos y enlaces a nuevas informaciones sobre la catástrofe medioambiental. A su vez, el director gerente del Fondo Monetario Internacional contribuía como bloguero con un post sobre crecimiento y empleo. Junto a otros sesudas publicaciones que analizan la actualidad nacional e internacional, se destacaba un mix de noticias donde cabían las fotos de la nueva mansión de Lady Gaga en Beverly Hills, una historia sobre por qué los hombres engañan a las mujeres, o los reveladores secretos de la modelo Kendra Wilkinson, que acaba de relatar en un libro sus encuentros sexuales con Hugh Hefner, fundador de Playboy.

Nada como darse un paseo por la redacción ubicada en el Soho neoyorquino para certificar que se trata de una empresa de la nueva era: un ejército de veinteañeros y treintañeros domina en la redacción. Con 127 empleados, 55 de ellos periodistas, frente a los 1000 de The New York Times , el The Huffington Post produce algunas noticias propias, pero, sobre todo, selecciona noticias de otros medios y las presenta del modo más elegante posible, y genera tráfico hacia esos medios mediante enlaces.

A la pregunta de cuál era la proporción de contenido propio frente a contenido enlazado se obtuvo la respuesta "te buscaré esos datos", cifras que no terminaron de llegar. Se financia mediante publicidad. Llevaban cinco años en pos del santo grial: la rentabilidad.
"Ya somos rentables", anuncia con orgullo Arianna Huffington con su pelo impecable de laca y su elegante chaqueta rosa larga. Eso sí, no facilita cifras. Según publicó Business Insider , los ingresos en 2009 fueron de 11,8 millones de euros.

Cuando puso en marcha este proyecto en mayo de 2005, ¿en algún momento imaginó que podía llegar a convertirse en semejante fenómeno?

Nunca sabes del todo cómo va a ir un proyecto. Fuimos afortunados en el momento del lanzamiento, fuimos el primer sitio que combinó el estar 24 horas, siete días a la semana, a base de noticias seleccionadas con nuestra particular visión, con una gran colección de voces en nuestro blog: empezamos con 500 blogueros y ahora tenemos 6.000. Desde el principio nos dimos cuenta de que la conversación, política y cultural, se movía al entorno online, pero muchas voces importantes no estaban allí.

La tendencia en el tráfico apunta a que antes de finales de año su web podría sobrepasar a la de The New York Times .

Yo prefiero fijarme en dónde estamos ahora. Estamos por delante de The Washington Post , de The Wall Street Journal y del USA Today . Prefiero cuidar nuestra visión de The Huffington Post . El tráfico es muy importante, afecta a los anunciantes, al alcance que tienes, pero no es el único criterio. Si así fuera, perderíamos el toque, la visión de The Huffington Post , que es combinar lo mejor de lo viejo con lo mejor de lo nuevo, los valores del periodismo tradicional (contrastar, ser justo, ser riguroso) y unirlo a todo lo bueno que tiene ser un periódico online. Tenemos una audiencia muy comprometida, el mes pasado recibimos casi tres millones de comentarios, estamos involucrados en todas las redes sociales (Facebook, Twitter)... Nuestros lectores leen, pero también comparten y a veces contribuyen con sus aportaciones a las historias.

Ustedes han apostado claramente por el periodismo ciudadano, pero, ¿en qué medida puede este alcanzar los estándares de calidad profesional, en términos de rigor, de no estar guiado por la opinión?

Yo creo en una fórmula híbrida de periodismo: necesitamos editores profesionales, periodistas profesionales y cientos de ciudadanos periodistas que lo harán como lo hicieron en el último levantamiento que se produjo en Irán, desde sus comunidades.

¿Cuáles considera que fueron las mejores decisiones que tomó para conducir al éxito a su web?

Una de las mejores decisiones fue que desde el principio quisimos que hubiera un ambiente civilizado: no permitimos ataques personales. Tenemos comentarios moderados por la tecnología y por moderadores, y eso crea un ambiente civilizado en el que se puede producir un auténtico debate, en el que puede haber disensiones, pero no una atmósfera tóxica. Una de las cosas que podemos hacer online, que es parte de su ADN, es seguir las historias: das una noticia y cada día añades algo. Nosotros contamos historias. Creemos que una de las cosas más importantes en periodismo es contar historias. No solo dar estadísticas, números, hechos.
La bloguera que desafía a los medios estadounidenses
La sección del Huffington Post dedicada al derrame de petróleo en el Golfo de México
Foto: lanacion.com
Ha costado cinco años conseguir la rentabilidad. El volumen de tráfico que tienen, 12,3 millones de usuarios únicos al mes, explica en parte los resultados. Pero su victoria es la de haber creado una gran comunidad que debate en la Red, que manda comentarios al ejército de 6.000 blogueros. "Cada día colocamos 250 posts originales", ilustra. A este gran tráfico se une una estructura de nuevo cuño, propia de la era digital: plantilla reducida (127 empleados frente a los 1.000 de The New York Times), bajos costes.

En cuanto al crecimiento de los ingresos publicitarios, Huffington explica que ha contribuido en gran medida el fichaje del ex director de publicidad de Yahoo! y la contratación de 10 experimentados ejecutivos de ventas. General Electric, Coke, Mercedes, Johnson&Johnson, Siemens, Microsoft, Toyota, Pepsi: los grandes están ahí.

Para mucha gente se ha producido una sorprendente evolución de sus ideas políticas, desde su apoyo a conservadores republicanos como Newt Gingrich hasta su conversión en adalid de la izquierda liberal.

Siempre he sido progresista en los temas sociales: estoy a favor del aborto, por el control de las armas, por los derechos de los gays, incluso cuando era republicana. La gran diferencia es que hubo un tiempo en que creí que el sector privado resolvería los problemas sociales de América. Luego vi en primera línea que eso no iba a producirse.

Dos años tardó en remontar el vuelo. Vio que la Red era el futuro. A Arianna Huffington, más que gurú de Internet, se la considera crack del marketing viral, de las técnicas de mercadotecnia que apuran las posibilidades de las redes sociales para multiplicar el número de personas que acceden a una marca o a un sitio web. El 9 de mayo de 2005 ya estaba en marcha su nuevo proyecto, The Huffington Post . Arianna es una luchadora. Nunca se rinde. En 2009, la revista Forbes le otorgaba el puesto número 12º en la lista de mujeres más influyentes en los medios.

Ustedes han puesto en marcha una iniciativa de periodismo de investigación sin ánimo de lucro, con 1,38 millones de dólares y 10 periodistas contratados. ¿Conseguirán este tipo de iniciativas preservar el periodismo de investigación, que algunos consideran en peligro de extinción?

Ahí está Propública (web norteamericana sin ánimo de lucro), que ganó el Premio Pullitzer. Hay un montón de webs locales que están investigando, financiadas por fundaciones, particulares, o sea, que esta es una vía, no solo de preservar el periodismo de investigación, sino de hacerlo mejor. A los medios tradicionales se les escaparon dos de las grandes historias de nuestro tiempo: la inexistencia de armas de destrucción masiva en Irak y lo que nos llevó a la crisis financiera.

Algunos de los medios de Rupert Murdoch ( The Wall Street Journal y The Times ) ya están cobrando por los contenidos, ¿ustedes lo harán o lo harían?

Como dice Jeff Jarvis, vivimos en la economía del link (enlace). Con este panorama económico, este recurso es la manera de monetizar contenido.

¿Y qué opina del hecho de que Rupert Murdoch diga que los sitios agregadores de noticias son piratas y plagiadores?

Si miras los hechos, lo que hacemos es el uso justo en virtud de las actuales leyes de copyright. Solo se toma un párrafo, o así, y se pone un link a la historia original. De ese modo generamos mucho tráfico hacia esa historia. Por ese motivo tenemos constantes peticiones de reporteros de otros medios para que enlacemos a sus historias. Hay mucha gente, en muchas industrias, que lo pasa mal en el proceso de ajuste a la nueva realidad. Esta es una tecnología disruptiva que ha sacudido a los editores, mucha gente está pasando por tiempos duros, tiempos de tomar conciencia y reconocer las nuevas realidades.

¿Cómo ve el panorama mediático dentro de cinco años, cuál es el futuro del periodismo?

Yo veo una convergencia. Los medios tradicionales harán cada vez más cosas online, involucrarán a sus lectores cada vez más, y los medios online, como The Huffington Post , harán cada vez más periodismo tradicional.

¿Desaparecerán los periódicos?

No. Adoramos los periódicos, hay algo en nuestro ADN que nos hace amar los periódicos. Yo estoy suscrita a siete periódicos. No creo que vayan a desaparecer. Van a tener que ajustarse: algunos desaparecerán, pero los mejores se ajustarán y sobrevivirán. Nosotros queremos revitalizar el periodismo ciudadano, con más historias, más transparencia... Es fundamental no vender la integridad periodística a cambio de acceso, que es uno de los peligros: muchas veces, para conseguir la gran entrevista, ves a los periodistas entregar su independencia.

La esperan desde hace 10 minutos para una reunión. Arianna sale de la oficina dejando la estela de su perfume. Está en racha. Se siente partícipe de una revolución. Y ella encabeza la marcha.
© El Pais, SL http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1284949

No hay comentarios:

Publicar un comentario